viernes, 21 de enero de 2011

GEOGRAFÍA

La profesión de geógrafo es una de las más antiguas de la historia. En su propósito por conocer lo que le rodea el hombre ha ido descubriendo los diferentes mecanismos que rigen el sistema natural y las relaciones de éste con la humanidad.
Nos remontamos al S. VI a.C. a la civilización griega en la que se despierta el interés por conocer nuevos territorios y describirlos pues esto se convertía en una importante arma comercial y militar, de ahí el éxito de sus operaciones. Precisamente, de esta época es el considerado para muchos primer geógrafo de la historia, Erastótenes de Cirene (ver) que hizo la primera representación del mundo griego. Más conocida es el romano Estrabón que definiría la Península Ibérica como la “piel de toro” por el parentesco entre el contorno de Hispania y una piel de vacuno extendida. Pero sin duda cuando la figura del geógrafo cuando cobra mayor relevancia es en la Edad Moderna con los descubrimientos de las nuevas tierras, que había que inventariar y cartografiar, y por los conflictos bélicos en los que el geógrafo desempeña un papel fundamental por ser conocedor de los distintos elementos naturales que intervienen a la hora de marcar la estrategia a seguir. Pero esto es algo que también se ha dado y se da hoy día. Es conocida la actividad de los geógrafos que acompañaron al presidente Wilson a la Conferencia de Versalles, después de la Primera Guerra Mundial y los que planificaron el nuevo concierto mundial durante y después de la Segunda Guerra Mundial.
El geógrafo es un gran desconocido a pesar de las múltiples opciones que puede ofrecer a la sociedad, pues es capaz de mostrar una visión integral de las situaciones más diversas, fusionando lo natural con lo humano, pues considera al hombre un elemento más, dentro del sistema natural y, por tanto, buscará un equilibrio en sus planteamientos, huyendo de enfoques sectoriales.
La docencia es la casi única salida profesional que la mayoría de la gente piensa que tiene la Geografía, pero lejos de ello nos encontramos ante nosotros con una disciplina que cuenta con un amplio abanico de posibilidades, que en muchos casos se desconocen y no se promocionan adecuadamente. Las cuestiones relacionadas con el medio ambiente son uno de los campos donde la Geografía ha aportado su capacidad de analizar de forma integrada la información sobre el medio físico y las actividades humanas. Los geógrafos aportan su capacidad de abordar de forma concreta los problemas ambientales dentro del marco de referencia de una visión global. En los últimos años, con la creciente sensibilización social por la materia, se ha convertido en uno de los principales campos de expansión, desarrollándose tareas como la ordenación y gestión de espacios naturales, auditorías y calidad ambiental, Agendas 21 locales, planes de prevención de riesgos naturaless, evaluación de impacto ambiental o climatología. Por ejemplo, Florenci Rei (Cadena Ser y Cuatro) es geógrafo y Mario Picazo (Telecinco), entre otras carreras, estudió Geografía.

Otro de los campos en los que trabaja el geógrafo es el análisis, ordenación y promoción del territorio, precisamente por su capacidad de síntesis e integración multisectorial, de modo que no es raro encontrarse a estos profesionales dirigiendo equipos dedicados a la ordenación territorial, demografía, análisis socioeconómicos, planificación urbanística, desarrollo local y rural, etc. A esto se le une la tradicional presencia en el sector de la cartografía y, en los cada vez más extendidos, sistemas de información geográfica (SIG). Tampoco podemos pasar por alto otras actividades relacionadas con la interpretación de los recursos territoriales, la formación y la divulgación. Hay muchos geógrafos trabajando en medios de comunicación y editoriales ante la creciente demanda en materia de turismo y ocio cultural, sin olvidarnos de los que están participando como voluntariados o como profesionales en programas de solidaridad internacional y cooperación al desarrollo en países de América Latina y África, a través de organizaciones no gubernamentales.
A pesar de la multitud de áreas en las que puede trabajar el geógrafo la sociedad, aún, no ha asumido su papel. Por ello las Administraciones Públicas deberían de tomar conciencia de las competencias de estos profesionales y tenerlos en cuenta en muchos procesos selectivos en los que se les excluyen ante el desconocimiento del ámbito de trabajo de esta disciplina. Comunidades Autónomas como Cantabria o Andalucía, ya cuentan con cuerpos específicos de geógrafos, pero otras, como Castilla y León, no, obligando a la mayor parte de ellos a emigrar. Precisamente nuestra Comunidad es una de las más grandes de la Unión Europea por lo que tiene mucho territorio por explotar y lo geógrafos tendrían mucho que aportar. Una adecuada promoción de las universidades y de los propios geógrafos sería, sin duda, la principal arma de reivindicación de nuestro lugar en el mercado laboral.
David Sánchez Sáez, Geógrafo. +INFO