Parece ser que la laguna de El Oso suele convertirse en destino final para los ánsares comunes -Anser anser- que nos visitan cada otoño-invierno.
También es probable que a los 800 ejemplares existentes en la actualidad se arrimen más ánsares y dependerá de como aprieten las condiciones climatológicas mas al norte de este entorno.
Verlos volar resulta espectacular.
Sobre todo cuando se levantan en bando y sobrevuelan el espacio en varias direcciones para volverse a posar de nuevo, transcurridos unos minutos.
Los contrastes suelen resultar atractivos, sólo queda contemplar como se aprecia la sierra del Quintanar y Mujer Muerta al fondo y nevada estos días.
Algo que vengo apreciando, a través de las imágenes que obtengo, es la facilidad con la que descargan las deyecciones sobre todo cuando remontan el vuelo ante un imprevisto que no controlan a tiempo.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello