sábado, 20 de junio de 2009

FLORA DE LA UNIVERSIDAD


RETAMA –Retama sphaerocarpa (L.) Boiss.-
Familia Leguminosae (ver)

En plena floración, salpicando numerosos lugares, esta retama nos presenta sus credenciales. En las cercanías de Arévalo, jalonando el río Arevalillo, o a lo largo del camino verde, tras pasar Párraces, en las inmediaciones de la meta, un grupo de matas nos deleitan, fundamentalmente al caer la tarde, con su refinado aroma, parecido al de la flor de jazmín.
Floración de retamas en las inmediaciones de Arévalo.
El botánico suizo Pierre Edmond Boissier (ver) aceptó para dar nombre científico a este género de las leguminosas la denominación popular española, retama, pues, por no criarse esta planta en otro punto de Europa fuera de la Península Ibérica, le era desconocida cuando vino a España. A su vez la voz española derivó del nombre árabe rátam o ratáma, al parecer a mediados del siglo XIV. El epíteto específico, sphaerocarpa, alude a la forma más o menos esferoidal de su fruto. Según Quer (ver), esta especie abastecía de leña a todas las tahonas de Madrid, para lo cual era incluso cultivada aprovechando los arenales de la base de la Sierra de Guadarrama, que por pobreza no eran adecuados para un mejor aprovechamiento; probablemente deriven de esta época muchos de los extensos retamales actuales. En el Territorio Natural de la Universidad de la Tierra de Arévalo se encuentra bien extendida, fundamentalmente sobre los suelos arenosos, ácidos y en numerosos casos, pinariegos.
Detalle de las amariposadas y muy menuditas flores.
La retama común (ver) es un arbusto, fanérofito (ver), de entre 1 a 3 m con ramas estriadas, junciformes, muy flexibles, que pierden prontamente las hojas, desempeñando el tallo la función asimiladora; tiene las ramillas de un color gris o gris verdoso, con hojas diminutas desprovistas de peciolo. Las flores –amarillas, amariposadas y muy menuditas de entre 4 y 7 mm- se disponen en racimillos laterales multifloros. El fruto es una legumbre globosa, algo arriñonada, con superficie lisa y ápice romo, de color pajizo; en su interior va una semilla –ráramente dos- que queda en libertad actuando en conjunto como una pequeña maraca o sonajero al ser balanceadas las ramas por el viento.
Sobre el sistema radical presenta unos nódulos que se encuentran colonizados por la bacteria rhizobium (ver), que caracteriza a las plantas de la familia leguminosas; estos nódulos, que son fijadores del nitrógeno atmosférico, poseen una hemoglobina (leg-hemoglobina) encargada de la oxigenación, próxima en su composición química a la humana y quizá pudieron ser eficaces en ciertas enfermedades carenciales; de ahí pudo surgir muy bien la leyenda de sus extraordinarias virtudes, según nos cuenta Bernardo de Cienfuegos.

Retamas en floración junto al río Adaja en T.M. de Tiñosillos.
Suele florecer de mayo a junio según latitud y altitud, sobre cualquier tipo de terreno, en lugares secos y abiertos, como ribazos, laderas soleadas, claros de bosques mediterráneos no excesivamente fríos y húmedos.
Galérida Ornitólogos.
Fotografía de V. Coello.