lunes, 22 de marzo de 2010

La urbanización de Villanueva en entredicho

Declara en el Juzgado de Arévalo el propietario de la constructora
La urbanización de Villanueva no tiene “cobertura legal ni técnica”, según SEO

María Cuenca
“No hay cobertura legal ni técnica” para las obras de la macrourbanización de Villanueva de Gómez. Es la conclusión a la que llega SEO/BirdLife, una de las organizaciones que ejerce la acusación, después de la declaración en el Juzgado de Arévalo de dos de los imputados: el constructor y el ingeniero que elaboró el proyecto.
Luis Ángel Ilarraza, propietario de Inveralde, la empresa promotora, y Raúl García Marcos, quien redactó el proyecto y también el informe con el que el Ayuntamiento ha recurrido la paralización cautelar de las obras, dictada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Ávila, prestaron declaración este lunes en el Juzgado de Arévalo, que instruye el caso sobre las posibles irregularidades que se pudieron cometer en la tramitación del proyecto urbanístico y la ejecución de las obras en los viales.
“Siguen teniendo el mismo discurso de que tenían una licencia”, ha señalado al respecto el coordinador del Área de Conservación de Especies y Espacios en SEO/BirdLife, Juan Carlos Atienza, quien considera que “no hay cobertura legal ni técnica para las obras de los sistemas generales” y que “lo único que tenía un planeamiento detallado era el sector 3, pero los sistemas generales se hicieron en todos los sectores y no solo los viales, sino que incluyen todo el sistema de telefonía, alumbrado y agua”.
Suelo protegido
También este lunes declaraban como testigos un perito que elaboró un informe en el que se concluía que se había invadido suelo protegido, y un técnico de la Diputación que visó el proyecto de sistemas generales. Según Atienza, “se ha reafirmado que ha habido ocupación de suelo protegido”.
El viernes declarará como imputado el alcalde de Villanueva de Gómez, José Martín Llorente, y la secretaria del Ayuntamiento lo hará como testigo.
En una superficie de 700 hectáreas, de las que 350 son urbanizables, se pretendían construir alrededor de 8.000 viviendas, tres campos de golf y un hotel, entre otras instalaciones, si bien las obras se encuentran paralizadas. Se trata de una zona de pinar en la que está acreditada la presencia de águila imperial ibérica, en peligro de extinción, y en la que no está garantizado el abastecimiento de agua potable, dado que los actuales 150 habitantes del municipio se abastecen con agua embotellada desde hace varios años por la contaminación con nitratos que sufre el acuífero de Los Arenales. http://www.aviladigital.com/subseccion/subseccion2/fichaNoticia.aspx?IdNoticia=105473