La presencia de plumas me proporcionó la posibilidad de seguir el rastro de alguna avutarda ibérica -Otis tarda-
Previamente detecté alguna huella como la de esta imagen.
Incluso excrementos recientes.
Finalmente pude observar un pequeño grupo, muy cauteloso, en las proximidades. Es una zona de avistamiento más o menos segura, aunque hay que buscarlas con atención. Estos parajes se encuentran sin ningún tipo de figura de protección y la conservación de esta especie, tan singular e importante, requiere una revisión efectiva de las zonas ZEPA morañegas.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello