Si, La Moraña está llena de contrastes. Estos días se pueden ver interesantes grupos poblacionales de cigüeñuela común -Himantopus himantopus- asociados a zonas húmedas y a encharcamientos puntuales.
Su figura esbelta de largas patas y ese aspecto frágil a primera vista nos permite identificarlas con rapidez y disfrutar de su contemplación.
Pareja de cigüeñuela en la que se puede apreciar la distinción de sexo. A la izquierda la hembra.
Cerca del humedal anterior y en numerosas iglesias de esta comarca se puede apreciar otro visitante estival. El cernícalo primilla -Falco naumanni- prepara su reproducción anual, acomoda sus oquedades y está alerta siempre como ocurre con este flamante macho.
La hembra prefiere otear el horizonte antes de iniciar la incubación dejando libre y perdida su larga mirada de halcón.
En las inmediaciones, sobre todo en los cableados, podemos ver esta especie que se encuentra en franca expansión. La tórtola turca -Streptopelia decaocto- se encuentra presente todo el año como también ocurre con la paloma cimarrona o doméstica -Columba livia- ocupante principal de la mayor parte de las oquedades hasta la llegada del cernícalo primilla. Merece la pena recorrer estos espacios o lugares morañegos y disfrutar de una merecida primavera.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello