domingo, 9 de septiembre de 2018

Moritos por La Moraña, Ávila

 Que interesantes son los pasos postnupciales en los cuales nos encontramos inmersos y vaya que lo aprovechamos y disfrutamos.
 Estos días tenemos la oportunidad de chequear algunas de las zonas húmedas dispersas por esta comarca y otras, con buenos resultados. Por ejemplo, la observación de un par de docenas de ejemplares de morito común -Plegadis falcinellus- en la laguna de San Bartolomé, Maello.
 El nivel de contacto en red, entre varios ornitólogos locales, nos permite observar como se desplazan de unos humedales a otros para satisfacer las necesidades tróficas. Las nuevas tecnologías y la incorporación de nuevas personas elevan la calidad del estudio y seguimiento de estas y otras especies.
 Cabe mencionar de nuevo la necesidad de proteger de manera más eficaz esta red de humedales y fomentar la concienciación en clave de conservación de la biodiversidad a veces efímera y sensible.
 La biodiversidad de especies constituye todo un patrimonio ambiental de todos los ciudadanos y en ese marco de referencia seguiremos demandando responsabilidad administrativa. Especies como el andarríos chico -Actitis hypoleucos- o el chorlitejo chico -Charadrius dubius-, por poner un ejemplo gráfico, no pueden por si solas. Pensemos en global y actuemos localmente.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS ABULENSES/Imagen: V.Coello

Zaragozano, septiembre 2018