Mostrando entradas con la etiqueta Flora arbustiva. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Flora arbustiva. Mostrar todas las entradas

viernes, 18 de mayo de 2018

Catálogo de árboles singulares de interés local en Arévalo

Este viernes, 18 de mayo, presentamos el Catálogo de Árboles Singulares de interés Local en Arévalo. Casa del Concejo, 20.30 h.

viernes, 28 de agosto de 2015

Etnobotánica Abulense

Casa del Concejo, sábado 29 de agosto de 2015, Arévalo
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS

viernes, 18 de julio de 2014

chinche sobre alcachofera

 En la anterior entrada mencionábamos a esta especie de la clase insecta: la chinche de campo mediterránea -Carpocoris mediterraneus- que se encontraba alojada sobre la mata de alcachofera.
 Los ángulos del pronoto (la placa exoesquelética dorsal del primer anillo torácico o prototórax) suelen ser prominentes y de color negro, el resto verde-marrón. El scutellum (pieza triangular que se sitúa a continuación del pronotum y perteneciente al mesotórax) de color verdoso-amarillento y que presenta manchas o puntos negros.
 En el mesotórax se insertan el primer par de alas o hemyélitros (alas quitinosas de función protectora), en el metotórax las alas verdaderas o membranosas. El abdomen está recubierto por hemyélitros bajo los cuales se encuentran plegadas las alas membranosas. El conjunto presenta colores naranja, verde y marrón. El abdomen posee un margen cebrado de color amarillo y negro.
 Pareja de chinches en plena cópula.
 Tanto los adultos como las ninfas chupan, para alimentarse, la savia de las plantas que parasitan entre las que destacan los cardos y diversas umbelíferas así como las alcachoferas. Especie mediterránea occidental y del norte de África.
 Finalizada la cópula uno de los ejemplares se perdía entra las brácteas endurecidas de la alcachofera para pasar lo más inadvertido posible.
 La alcachofera guardaba más sorpresas: un ejemplar de empusa o mantis palo -Empusa pennata- que será nuestra próxima protagonista.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello

miércoles, 16 de julio de 2014

alcachofera o cardo comestible en La Moraña

 Aunque de manera muy aislada, es posible encontrar ejemplares de alcachofa o alcachofera -Cynara cardunculus (L.) Baill- en algunas localizaciones de La Moraña y Tierra de Arévalo. También denominada como cardo, cardo comestible o cardo de huerta, es una planta cultivada como alimento en climas templados. Pertenece al género Cynara dentro de la familia Asteraceae. Se nombra como alcachofera, tanto la parte de la planta entera, como la inflorescencia en capítulo, cabeza floral comestible.
En ocasiones se asilvestra como pasa con este ejemplar encontrado cerca del lavajo del ganso en la zona comprendida entre los términos municipales de Castellanos de Zapardiel y Barromán. Se asemeja al cardo, con grandes flores redondas agrupadas sobre un mismo eje que alcanza hasta los dos metros de altura. Originalmente procedente del Mediterráneo, Noroeste de África, la alcachofera es pariente muy próxima del cardo borriquero común o, lo que mayormente se llama nardo del que procede tras haber ido cambiando por numerosos años de cultivo.
Vuelve a brotar de la cepa todos los años, pasado el invierno, si el frío no la heló. Echa un rosetón de hojas enteras hasta profundamente segmentadas aunque menos divididas que las del cardo y con pocas o ninguna espina. Las hojas tienen color verde claro en el haz y en el envés están cubiertas por unas fibrillas blanquecinas que le dan un aspecto pálido. Tanto el rabillo de la hoja como la vena principal tienen costillas longitudinales muy salientes. Cuando la planta entallece, echa un vástago más o menos alto, rollizo, pero también costilludo y asurcado con cada vez hojas más escasas y menos divididas a medida que estén más altas en dicho tallo. En su apex, y en algunas divisiones laterales, traen unas cabezuelas muy gruesas, las alcachofas, cubiertas de numerosas brácteas coriáceas, en la base de las cuales está lo tierno y comestible. Al florecer, endurecen mucho dichas brácteas y no se pueden aprovechar para comer, aunque no rematen en espinas como la de los cardos.
La inflorescencia es aprovechada por los insectos que acuden para libar el néctar y también por otras especies como esta chinche mediterránea -Carpocoris mediterraneus- de la que hablaremos en la siguiente entrada.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello

domingo, 29 de junio de 2014

enebro común en el río Arevalillo

 Junto a David García López recorrí esta tarde un tramo del río Arevalillo entre los términos municipales de Nava de Arévalo y Tiñosillos, Ávila. Los parajes son conocidos como El Quemado y Cañón de la Pesquera, respectivamente, encontrándose a su paso en las inmediaciones la Cañada Real Leones Occidental.
 Hemos llegado a descubrir hasta cuatro ejemplares de enebro común -Juniperus communis L.- en la zona. Para algunos autores puede tratarse de la -ssp. hemisphaerica (J. & C. Presl.) Nyman.- una estirpe de transición a las formas de montaña de -J. oxycedrus- y que en España aparece en las sierras del Centro, Gredos y otras. Se describe como mata de hasta 2-3 m de talla, densa, extendida y convexa, a cuya forma ideal alude el nombre.
 Hojas ericoideas en la juventud, luego yuniperoideas, patentes, rígidas y pinchudas, en verticilos muy aproximados de 10-20 mm de longitud con banda blanca o glauca en el haz, a veces bífida en la base. Gálbulos globosos u ovoideos que van cambiando de color con la madurez. Éstos maduran a lo largo del tercer año y la floración se produce en primavera.
 También encontramos un imago de procesionaria del pino -Thaumetopoea pityocampa Schiff.- pues en estos días de verano las mariposas emergen del suelo generalmente al atardecer.
 Es interesante la zona y a pesar de los rigores del verano y la hora del paseo pudimos ver y escuchar, aunque no fotografiar, por ejemplo: ejemplares de oropéndola, rabilargo, mirlo, abejaruco y varias especies de paseriformes. La flora arbórea se encuentra representada por pinos negrales resineros y albares piñoneros, fresnos, sauces, chopos y álamos principalmente. También arbustos como el rosal silvestre, majuelos, algún ejemplar de jara de laurel y en plena floración como la retama común -Retama sphaerocarpa (L.) Boiss.-.
 Legumbres de retama negra -Cytisus scoparius (L.) Link-
 Piorno blanco -Astragalus granatensis-
 El río Arevalillo ha ido excavando un pequeño cañón a lo largo de su historia geológica. Cañón que se hace más patente según la dureza de los materiales que va encontrando a su paso las estacionarias aguas de este río que nace en la vertiente noreste del Cerro de Gorría, sierra de Ávila, en las inmediaciones del municipio de Narrillos del Rebollar
 Aún quedan testigos de lo que en su día fue este cauce. Esta señal de "acotado de pesca" data probablemente de la época del extinto Instituto para la Conservación de la Naturaleza, si, el famoso ICONA. Estas zonas fueron muy interesantes para el cangrejo autóctono -Austropotamobius pallipes- hoy en día desaparecido por las nefastas prácticas pesqueras.
 Hoy encontramos, sin embargo, varios ejemplares de cangrejo rojo americano -Procambarus clarkii- declarado como especie invasora la cual conviene erradicar.
 En la medida que el río se va encajonando alterna con sotos fluviales más o menos extensos los cuales han sido aprovechados en ocasiones para repoblaciones con pinos. No estamos de acuerdo, pues hubiera sido más interesante incrementar la riqueza y la biodiversidad con las especies de frondosas típicas del país.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello

martes, 13 de mayo de 2014

retama negra o escoba

 La retama negra o escoba -Cytisus scoparius (L.)Link- se encuentra en plena floración.
 Se puede apreciar como los insectos se sienten atraídos por el néctar que puedan libar.
 Las flores amariposadas y amarillas suelen ser de buen tamaño (16-25 mm), con rabillo largo, solitarias o en parejas y dispuestas en las axilas de las hojas. Cáliz lampiño, hendido en dos labios aovados con 2 y 3 pequeños dientecitos apicales respectivamente.
 Corola con estandarte redondeado, a menudo algo ecotado en el ápice y quilla curvada, de su misma longitud, finalmente caída, dejando ver el manojo de estambres.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello

martes, 15 de abril de 2014

malvella sherardiana en peligro

 En una entrada anterior de este blog ya hablábamos de esta rara malva (ver). Los escasos ejemplares de -Malvella sherardiana (L) Jaub. & Spach- que localizamos en el paraje natural de Cantazorras, Arévalo, no pasan por su mejor momento.
 A pesar de la necesidad de su conservación, hemos podido contrastar la posibilidad de que desaparezca definitivamente como consecuencia del uso deportivo espontáneo que se da a esta zona. Como se puede observar en la imagen, la parte izda es la rodada de una moto tras la práctica de moto cross.  Es verdad que hace decenas de años Cantazorras fue utilizado como campo deportivo pero su práctica cayó en desuso a los pocos años.
 El tipo de suelo calizo y yesoso (ver) impide su utilización en cuanto existen precipitaciones aunque sean de escasa entidad. La imagen ofrece sin dudas la muestra del tipo de suelo y con el abandono de esta práctica deportiva se está recuperando como un espacio interesante para la flora del terreno como ya se ha comentado en anteriores entradas.
 También es un espacio interesante para la observación de aves y paseriformes como esta curruca zarcera -Sylvia communis- que es especie estival nidificante y aunque de carácter reservado su observación suele ser más sencilla que la de otras currucas. Otro rasgo  a destacar es su canto en vuelo o desde posaderos fijos en lugares destacados.
 Interesante también esta cogujada montesina -Galerida theklae- y muy similar a la cogujada común
 Curruca zarcera en lugar destacado sobre una mata de aulaga -Genista scorpius (L)DC.- y en la siguiente imagen el paisaje que se puede apreciar girando la mirada hacia el sur. Silueta de Arévalo y la floración de colza realzada por el verde de los cereales aún tiernos. 
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello

miércoles, 18 de diciembre de 2013

días de niebla y luna

 La atmósfera anticiclónica en los campos morañegos propiciaba estos días nieblas y heladas nocturnas. Estos ejemplares de perdiz roja -Alectoris rufa- se refugiaban de las inclemencias arropándose entre ellas después de haber superado otra jornada de caza menor.
 La imagen muestra el castillo de Arévalo, fortaleza que alberga un interesante museo de cereales y desde aquí os recomendamos la visita que puede completarse con monumentos románico-mudéjar en el casco histórico y gastronomía del terreno.
La retama común o escoba florida -Retama sphaerocarpa (L.) Boiss.- mostraba sus frutos esferoidales y de color amarillo pajizo con el paso de la niebla que iba levantando en esos momentos. En su interior alojan normalmente una semilla oscura y dura. 
 También los paseriformes sufren los rigores de estos días húmedos y fríos. Bandos de estornino pinto -Sturnus vulgaris- revoloteaban en busca de semillas por los rastrojos morañegos.
 Antigua ermita de Las Olmedillas, Palacios de Goda.
 De nuevo los estorninos
 Pintos y negros -Sturnus vulgaris y unicolor- levantando el vuelo a cada susto.
 También se pueden observar otros paseriformes como pinzones, jilgueros, pardillos y alaudidos entre otros.
 Se nota que este año se han dedicado más hectáreas a los cultivos de regadío. Grandes infraestructuras para el riego se encuentran dispersas por las zonas regables de los diversos sectores del Adaja. Esto supone que numerosas aves esteparias que poblaban estos espacios deberán buscar zonas más idóneas para su campeo.
 Con la niebla presente de nuevo con las últimas luces de la tarde no dejamos de asombrarnos por el paisaje de arboledas, cielos y la entrada de centenares de ejemplares de grulla común -Grus grus- hacia la laguna de El Oso y en las proximidades de uno de sus observatorios con la luna como testigo.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/imagen: V.Coello