PRISMÁTICOS
Con la entrada denominada salida de campo pretendemos abordar el equipamiento necesario para que nuestras jornadas de pajareo o campeo, de salida de campo vaya, sean lo más eficaces posible, teniendo en cuenta el variado material con el que podremos contar. Por ejemplo: aparatos para mejorar la visión, tecnología fotográfica y de videoimagen y las necesarias, como variadas, guías de especies tanto en fauna, flora, paisajes o rutas de senderismo.
Con la entrada denominada salida de campo pretendemos abordar el equipamiento necesario para que nuestras jornadas de pajareo o campeo, de salida de campo vaya, sean lo más eficaces posible, teniendo en cuenta el variado material con el que podremos contar. Por ejemplo: aparatos para mejorar la visión, tecnología fotográfica y de videoimagen y las necesarias, como variadas, guías de especies tanto en fauna, flora, paisajes o rutas de senderismo.
Importante resulta, también, la propia equipación que podemos vestir, los macutos de transporte e incluso la alimentación para las largas jornadas de campo.
Iniciamos este ámbito con los prismáticos como primera herramienta, muy necesaria por cierto, para poder ver un poco más allá.
Los prismáticos son prácticamente imprescindibles para la observación de aves y fauna en general.
Deberás tener en cuenta lo siguiente a la hora de elegirlos: 1. No deben ser pesados. 2. Algunas de las ópticas más adecuadas para la observación de aves son: 8x30, 8x40, 7x50 y 10x50. El primer número (7, 8 ó 10) hace referencia a los aumentos y el segundo (30, 40 ó 50) al diámetro en milímetros del objetivo. Si dividimos el segundo número entre el primero obtendremos la luminosidad de los prismáticos; así los más luminosos serían los de 7x50 y los menos el de 8x30. No es aconsejable que tengan más de 10 aumentos porque se vuelven ya muy pesados y nos cuesta trabajo mantener la estabilidad de la imagen usándolos "a brazo alzado", es decir, sin trípode. Ten en cuenta también la distancia mínima de enfoque (hay prismáticos que no dejan enfocar más cerca de 8-10 metros y esto es a veces un engorro) y el ángulo de visión que abarcan para que no sea muy reducido. 3. Por un precio de entre 60€ y 1800€ tendremos unos prismáticos más o menos aceptables. 4. Si es posible que estén forrados de goma porque este aspecto, aunque los encarece, los protege de los golpes. 5. Procura utilizar una correa cómoda; te ahorrará muchos problemas.
En cuanto al tipo de óptica existen dos tipos de prismáticos:
• Los de "prismas de Porro": inventados por el italiano Porro a finales del siglo XIX. Es el sistema que se usa en la mayoría de los prismáticos. Su principal característica es que los objetivos se encuentran bastante separados y la luz no pasa directamente a los ojos. Es un sistema que está bastante perfeccionado pero que tiene como principal inconveniente el hecho de que para enfocarlos se desplazan los oculares lo que puede originar problemas a la hora de mantener dicho enfoque.
• Los de "prismas de techo": son de invención más reciente. Su principal característica es que los objetivos y oculares están situados en línea recta por lo que la luz se dirige directamente a nuestros ojos. Son prismáticos más compactos y el enfoque se hace internamente por lo que es más seguro que los anteriores en los que se movían los oculares. Son, estos prismáticos, por lo general más caros.
*Breve apunte sobre prismas de techo y de porro
Los prismáticos con prismas de techo son más compactos, más ligeros y, en muchas ocasiones estancos. De cualquier forma, los prismas de techo tienen el inconveniente de necesitar un tratamiento/diseño, llamado corrección de fase. Hacer prismas con estas características es muy caro, por lo que los prismáticos económicos con prismas de techo no lo llevan. Esto hace que a igualdad de precio, en la gama media, unos prismáticos con prismas de porro tendrán una calidad óptica bastante superior a unos con prismas de techo. Por ello, hay que valorar si lo que más importa son las características que aporta el prisma de techo, o bien la calidad óptica.
Consejos para usarlos correctamente:
a. Para adaptar los prismáticos a ti tendrás primero que abrirlos o cerrarlos adecuadamente según sea la separación de tus ojos. A continuación habrá que enfocar correctamente con ellos para lo cual mira primero por el ocular que no es regulable y mueve la rueda de enfoque hasta que veas correctamente (para esta prueba puede ser útil que mires algún letrero); a continuación mira solo por el ocular móvil y mueve su rueda de ajuste, sin tocar la de enfoque, hasta que veas con toda la nitidez posible; por último fíjate en la marca que te indica el ocular móvil para que a partir de ahora la tengas siempre como referencia a la hora de enfocar con tus prismáticos.
b. Aunque sea consejo "De Perogrullo", no mires nunca al sol.
c. Normalmente es mejor localizar primero a las aves sin prismáticos y luego utilizarlos. Además esto es especialmente importante con las aves en vuelo, sobre todo si son rápidas, porque nuestra primera intención es llevarnos los prismáticos a los ojos y en muchas ocasiones se nos pierden; suele ser más eficaz seguir a simple vista su vuelo y luego tratar de localizarlas con los binoculares.
d. Si eres un ornitólogo novel no te desesperes si se te "pierden" al principio todos los pájaros cuando tratas de verlos con los prismáticos.
e. Para limpiarlos asegúrate primero que no tienen arenilla soplando o con la ayuda de un pincel seco y luego frótalos suavemente con un paño de algodón tipo "limpiagafas". También venden kits de limpieza.
texto de Javier García Sáez y fotografías de Galérida Ornitólogos
texto de Javier García Sáez y fotografías de Galérida Ornitólogos