Retama de porte arbustivo elevado entre 1 y 3 m. Ramas largas y algo incurvadas. Flores grandes. Muy olorosas, en racimos terminales alargados, con rabillo bien desarrollado, naciendo en forma aislada de la axila de una pequeña bráctea caduca. Corola amarilla, amariposada, de 20 a 25 mm con estandarte ancho, aovado; quilla tan larga casi como el estandarte y terminada en pico algo curvo. Florece de mayo a julio.
Ramas largas y algo incurvadas, que pierden pronto las hojas, las más jóvenes algo infladas y fáciles de aplastar, por lo que recuerdan a los juncos. Podemos encontrarnos esta retama en setos, matorrales, claros de bosque, terraplenes, etc. Prefiere suelos profundos y algo frescos en toda la región mediterránea. En la Península ibérica se encuentra ampliamente extendida.
También es cultivada en los márgenes de caminos y carreteras o como planta ornamental en jardines. En el Territorio Natural de la Tierra de Arévalo y La Moraña podemos encontrarnos la retama de olor en las salidas, accesos y mediana de la autovía A-6, desde Adanero hasta Palacios de Goda, encontrándose en estos momentos en plena floración siendo su fragancia más que apreciable.
El nombre científico de este género deriva del griego spartium, voz con que se designaba a distintas plantas productoras de fibras textiles y empleadas para hacer ataduras; parece ser que fue adoptada por Discórides para designar a la gayomba. Sus flores y semillas se han empleado en medicina popular como aperitivo, laxante y emético –para provocar el vómito-. Sus tallos y ramos sirven como tintoriales, dando un bello color amarillo. Es planta melífera.
GALÉRIDA ORNITÓLOGOS/fotoCoello
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