La Junta decretó la veda total en nueve cotos de la Moraña por la aparición de aves envenenadas
Tras el inicio de la temporada de caza menor en Castilla y León este pasado domingo y un año después de que la Consejería de Medio Ambiente decretara el cierre de nueve cotos de ocho términos municipales de la Moraña en los que aparecieron hasta 30 ejemplares de especies protegidas o en peligro de extinción muertas por el uso de cebos envenenados, los cazadores afectados por esta medida confían en que a lo largo de esta semana pueda ser levantada la sanción, aunque la confirmación deberá llegar mediante su publicación en el Boletín Oficial de la Comunidad. La resolución de la Junta de agosto de 2010 por la que se establecía la veda total en estos cotos, también contemplaba la posibilidad de que pasado el primer año, los cazadores afectados propusieran medidas para recuperar la actividad cinegética y las poblaciones de aves afectadas.
Y en esa línea se ha trabajado con un técnico de la Federación de Caza de Castilla y León con el objetivo de levantar la suspensión. Así, se han elaborado planes cinegéticos, se han instalado bebederos y aguardos, así como atalayas en las zonas de caza para que las rapaces puedan alimentarse, entre otras cosas. De momento, tal y como reconocen los propios cazadores, la recuperación de las especies afectadas por el empleo de venenos va bien y, aunque dejan claro que ellos no fueron los culpables, aseguran que han cumplido, pues continúan pagando los seguros de caza, los daños causados por las distintas especies cinegéticas en los cultivos agrícolas y también los ocasionados en las carreteras. No obstante, la decisión sobre la supresión de la sanción es cosa de la Consejería.